La eliminación de las cláusulas suelo superará los 800 millones de euros de pérdidas en los resultados bancarios. Esta cantidad se deduce de los informes que ha recibido el Banco de España por parte de las entidades bancarias. Sólo las tres entidades afectadas por Supremo declaran que perderán casi 600 este año.

El 31 de julio concluía el mes de plazo dado por el supervisor para que la banca revisara la adecuación de las cláusulas suelo a la sentencia del Tribunal Supremo, que el pasado 9 de mayo declaró abusivas todas aquellas que se hubieran comercializado con falta de transparencia.

El mandamiento del Banco de España no sólo se dirigía a las tres afectadas por la resolución, BBVA, Novagalicia y Cajamar, cuyas cláusulas anuló el alto tribunal por no cumplir con sus requisitos de transparencia, sino a todas aquellas que las han incluido, entre ellas el Banco Sabadell, Popular, CaixaBank o Bankia.

 

En el caso del BBVA, dejó de ganar unos 35 millones sólo en junio y, aunque en meses sucesivos el impacto dependerá de la evolución del Euribor, la cantidad podría rondar los 420 millones este año, según su informe.

 

Mientras, el Banco Popular calculó que dejaría de ingresar unos 9 millones mensuales en el hipotético caso de que la entidad tuviera que retirar las citadas cláusulas, siempre y cuando el Euribor se mantenga en los niveles actuales, lo que eleva la cifra a 108 millones al año.

Sabadell, si retira las cláusulas suelo, dejaría de ganar unos 100 millones al año.

Por su parte, Cajamar ha cifrado el impacto neto de impuestos de 2013 en 50,4 millones de euros, aunque no espera una «significativa reducción» del beneficio previsto para este período.
Novagalicia Banco (NCG Banco) informó de que la retirada de las cláusulas suelo de sus hipotecas le supondrá un impacto este año de 48 millones de euros netos, si se mantienen los tipos de interés en los niveles actuales.

En cuanto a Bankia, la cifra se reduce a los 50 millones brutos, mientras que desde CaixaBank se han limitado a informar de que el impacto será «muy limitado» pues sus hipotecas son transparentes, al tiempo que han defendido analizar cada contrato individualmente.

Aunque el ministro de Economía, Luis de Guindos, pidió al Banco de España que vigilase que toda la banca elimina las cláusulas cuando el cliente no haya sido debidamente informado, y sin que ello implicara un endurecimiento de otras condiciones del préstamo, parece que la Banca se resiste y que podría estar preparando una estrategia común para no hacerlo. Hay que tener en cuenta que ese dinero que los bancos dejarán de ganar es un dinero que no extraerán del ya exhausto pueblo español.