La luz vuelve a subir esta primera semana de septiembre y muy eficaces han de ser las maniobras que haga el Gobierno para abaratar su coste,  si quiere cumplir con la palabra dada por el presidente Pedro Sánchez de que ningún español pague más por la luz este año de lo que pago en 2018. Y es que no veo ni a Iberdrola ni a Endesa devolviendo lo cobrado de más a los españoles desde que comenzara el año.

De mantenerse durante todo el mes las tarifas eléctricas de los primeros siete días de septiembre, la factura del usuario medio alcanzaría los 104,81 euros según el análisis de FACUA-Consumidores en Acción sobre la evolución del precio semirregulado (PVPC). Serían casi 12 euros por encima del recibo más alto de la historia, los 93,10 euros del pasado mes de agosto. El incremento con respecto a los 66,78 euros de septiembre de 2020 representaría nada menos que el 56,9%, alcanzando cotas que jamás se habían producido. Pero se discute con acritud una subida del SMI que no llegaría a los 19 euros…

La asociación de consumidores considera escandaloso que el Gobierno siga sin reaccionar al brutal incremento de las tarifas con medidas de calado que recorten los infladísimos beneficios del sector eléctrico. FACUA ha planteado un decálogo de reivindicaciones al Gobierno, entre las que reclama la urgente la aprobación de un nuevo modelo de bono social que represente al menos un 50% de descuento en la factura y del que se puedan beneficiar las familias que cobren no más de 2 salarios mínimos, que aumentarían hasta 3 en función del número y características de sus miembros.

La asociación advierte de que en 2018, cuando el PSOE gobernaba en solitario, el Ministerio para la Transición Ecológica anunció que estudiaba poner en marcha la medida que ahora rechaza la ministra Teresa Ribera de sacar tanto a la nuclear como la hidráulica de la subasta marginalista para someterlas a precios máximos o fijos establecidos por el Gobierno. Medida que Ribera considera contraria al derecho comunitario pero que tiene implantada Francia con parte de su producción nuclear.

38 euros de subida interanual

Tomando como referencia las tarifas de los primeros siete días del mes, el recibo del usuario medio se encarecería en 38,03 euros con respecto a septiembre de 2020. Hasta la fecha, los cinco recibos del usuario medio más elevados a nivel histórico han sido los 93,10 euros de este agosto, los 88,66 euros del primer trimestre de 2012 (con el IVA al 18%), los 87,81 euros de enero de 2017, los 85,34 de julio de 2021 y los 83,55 euros de septiembre de 2018 (en los tres casos con el IVA al 21%).

29,5% de incremento de enero a agosto

Entre enero y agosto, el recibo del usuario medio ha acumulado una subida interanual del 29,5%. En los ocho primeros meses de 2021 ha representado una media de 79,61 euros mensuales (siempre con los impuestos incluidos), frente a los 61,46 euros del mismo periodo de 2020. Su importe, mes a mes, ha sido de 80,48 euros en enero (subida interanual del 18,5%), 62,08 euros en febrero (bajada interanual del 3,8%), 70,90 euros en marzo (+18,0%), 81,55 euros en abril (+46,4%), 82,13 euros en mayo (45,4%), 81,27 euros en junio (34,2%), 85,34 euros en julio (36,2%) y 93,10 euros en agosto (46,0%).

El usuario medio

El usuario medio utilizado por FACUA en sus análisis tiene una potencia contratada de 4,4 kW -la misma en horario punta y valle- y un consumo de 366 kWh mensuales. Es un perfil elaborado tras el análisis de varias decenas de miles de facturas de viviendas habitadas. En cuanto a los porcentajes de consumo en los tres tramos horarios del nuevo sistema de facturación, la asociación ha tomado como referencia el perfil de usuario medio tradicional sin discriminación horaria publicado por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que consume el 45% de la electricidad en el horario valle, el 29% en el horario punta y el 26% en el horario llano.

De lunes a viernes, el horario punta -el más caro- se aplica de 10 a 14 horas y de 18 a 22 horas, el llano de 14 a 18 horas y de 22 a 00 horas, y el valle -el menos caro- de 00 a 8 horas. Sábados, domingos y festivos nacionales se aplica las 24 horas el horario valle.

Subida del kilovatio hora

En septiembre de 2020, el precio del kWh se situó en una media de 13,00 céntimos (con el 27,19% de impuestos indirectos incluidos). En estos primeros días de septiembre, el precio medio ha sido de 18,90 céntimos en horario valle, 23,36 céntimos en horario llano y 34,63 céntimos en horario punta (incluido el 15,62% de impuestos indirectos que se aplican desde el 26 de junio). La media aritmética entre los tres tramos ha sido de 25,63 céntimos, un 97,2% más que hace un año. La media ponderada tomando como referencia el consumo del usuario medio en cada tramo ha sido de 24,61 céntimos, un 89,3% más elevada que en agosto de 2020.