Según el Índice de Esfuerzo Inmobiliario que recoge el último Informe Trimestral de Sociedad de Tasación, las familias españolas necesitaron de media 7,8 años de sueldo íntegro para la compra de una vivienda de tipo medio en 2015, la misma proporción que en 2014. Y ello a pesar de los descuentos en la vivienda, lo que indica que las bajadas en los sueldos de los españoles han sido similares durante ese año.

El ajuste del precio de la vivienda, superior al de la bajada de sueldos, ha hecho que el porcentaje de salario dedicado a su compra se haya reducido durante la crisis, desde el máximo marcado en 13,7 años en 2006, cuando era casi el doble. Desde el año 2012, el esfuerzo que realizan las familias para la compra de un inmueble se ha estabilizado ligeramente por encima de los 7,5 años. Este índice se calcula, en cada comunidad autónoma, a partir del cociente entre el valor de mercado de la vivienda y los ingresos medios brutos anuales que publica el INE en su encuesta anual de estructura salarial.

Las comunidades autónomas en las que este esfuerzo teórico es mayor para la compra de una vivienda son Baleares (16,2 años), Madrid (9,4 años), País Vasco (9,3 años) y Navarra (9 años). En el lado opuesto de la tabla, se encuentran Castilla-La Mancha (5,5 años), Murcia (5,5 años) y Extremadura (5,7 años).

La Sociedad de Tasación elabora un indicador de accesibilidad que estima la relación entre el poder adquisitivo real de una familia media y el teórico necesario para la adquisición de una vivienda de coste medio. El resultado, con base 100, permite medir la distancia a que se encuentran los salarios reales de los teóricos que serían necesarios para la adquisición de una vivienda media. El índice arroja un resultado nacional de 96 puntos de media al cierre de 2015, siete puntos más que en 2014.

De esta manera podemos observar grandes diferencias entre comunidades , desde aquellas en las que la comparativa supera los 130 puntos, como en Castilla-La Mancha, Extremadura y Murcia, esto es, lugares donde los salarios son suficientes para la adquisición de una casa, hasta Baleares, muy influenciado por la compraventa de extranjeros, donde no se alcanzan ni los 50 puntos y los nacionales son los claros perjudicados.