Cuando no son los Consejos de Ministros de los viernes, son las medidas sorpresa de Montoro. Así los Presupuestos Generales del Estado para 2015, han traído para los españoles una nueva medida impositiva, a traición, como tiene por costumbre el Gobierno que nos aflije. Fue el propio Cristobal Montoro quien dijo que bajaría nuestros impuestos para fortalecer el crecimiento económico. Una nueva mentira más para los que quieran creérsela en este año electoral. Y sino que se lo digan a los más de siete millones de afectados por la nueva subida del catastro.

Esta subida del catastro, o catastrazo, como ya se le llama, afectará con nuevas subidas de impuestos a más 7,4 millones de viviendas. Y los ayuntamientos, caninos tras la larga crisis inmobiliaria que nos afecta, esperan la subida, que llevan mucho tiempo solicitando, y su repercusión en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), como precioso recurso para sanear sus cuentas.

Varias organizaciones de consumidores, como la CECU, ya están denunciando esta medida que afectará nuestros bolsillos con nuevas subidas de impuestos, a pesar de las palabras del ministro. Millones de españoles van a pagar más por el IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) de su vivienda.

El Ministerio de Hacienda prevé la aplicación de coeficientes de actualización para aumentar el valor catastral, la referencia sobre la que se grava el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), en 1.668 municipios, que comprenden 7,4 millones de inmuebles, y reducirlo en otros 208, con 1,9 millones de inmuebles. Hacienda recuerda que esta actuación se enmarca en lo previsto en el artículo 32.2 del Texto Refundido de la Ley del Catastro Inmobiliario, que prevé que los Presupuestos puedan actualizar los valores catastrales de los inmuebles urbanos de un mismo municipio por aplicación de coeficientes en función del año de entrada en vigor de la correspondiente ponencia de valores

Sin embargo la realidad es que se va a subir de forma indiscriminada, a petición de los ayuntamientos, un IBI que ya ha sido aumentado en los últimos años. El Ministerio de Hacienda se defiende de las críticas y asegura que no habrá dos subidas –la del IBI y ahora la del catastro– sino que los ayuntamientos deberán elegir entre la del IBI aprobada hace dos años o esta actualización que traen los Presupuestos Generales del Estado para 2015.

Pero esta es la visión interesada de Montoro y no así la de los consumidores o las asociaciones que los representan. Así, la Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU), considera que los Presupuestos de 2015 traen un catastrazo que supondrá un incremento de impuestos a través del IBI, nada que ver con la presunta rebaja de impuestos de la que habla el ministro Montoro.

La CECU muestra su rechazo a esta nueva subida de impuestos que, a su juicio, tiene como única finalidad el afán recaudatorio para las administraciones locales, incrementando de forma indiscriminada un IBI que ya ha sido aumentado considerablemente y de forma unilateral por muchos ayuntamientos en los últimos años. La Confederación entiende que se deberían buscar fórmulas alternativas para elevar la financiación de los municipios, mejorando la gestión eficiente de los recursos y evitando subir unos impuestos que afectan a todos los ciudadanos de forma independiente de su situación económica.