Tras la presión de las organizaciones de consumidores y el rechazo de los usuarios, la Comisión Europea retira el plan de limitar a 90 días el roaming y presenta una nueva propuesta para evitar el uso abusivo cuando la desaparición de este servicio sea efectiva en junio de 2017.

La Comisión Europea ha hecho pública la nueva propuesta para poner en marcha el principio de “uso justo” que acompañará a la desaparición del roaming en junio de 2017. Esta propuesta es resultado de las modificaciones introducidas tras las protestas de las organizaciones de consumidores ante el proyecto inicial presentado por la Comisión.

En el borrador inicial, la Comisión Europea pretendía que, a pesar de la eliminación de los sobrecargos por roaming, se mantuviese un límite temporal de 90 días al uso del móvil en otro país de la Unión Europea para evitar así un posible uso abusivo por parte de los consumidores. Para OCU este límite suponía una penalización para todos los consumidores por un hipotético abuso de unos pocos.

Ante el rechazo que esta propuesta provocó entre los consumidores europeos, la Comisión Europea ha rectificado el borrador inicial eliminando la limitación de 90 días y dejando que sean las operadoras de telefonía las que determinen cuando un consumidor está haciendo un uso abusivo. Si así ocurriese, la operadora advertirá al consumidor. En caso de que existiese discrepancia ente operadora y consumidor se podrá iniciar un procedimiento de reclamación y si el conflicto no se resuelve el consumidor podrá recurrir a la autoridad reguladora nacional.

De igual modo, desde OCU se insta a las autoridades comunitarias a que implementen una reforma en los mercados mayoristas que impida que los operadores se carguen mutuamente sobrecostes excesivos por el uso que los consumidores hacen del teléfono en itinerancia, ya que podría dejar fuera de mercado a pequeños operadores virtuales que no tienen capacidad de recuperar esos costes. La actual propuesta de 4 céntimos de euro por minuto de llamada, un céntimo por SMS y 0,85 céntimos por megabyte, están muy alejados del coste mayorista que esos servicios tienen en los mercados más competitivos.

Para OCU, la nueva propuesta es un paso en la dirección correcta hacia el establecimiento de un verdadero mercado único en el ámbito de las telecomunicaciones, aunque advierte de la necesidad de que la normativa que debe poner en funcionamiento este nuevo sistema debe ser clara y debe evitar, en cualquier caso, que las operadoras puedan hacer un control sistemático del uso