La Audiencia Nacional ha condenado a la empresa Iberdrola por quemar gas para ganar subvenciones a las renovables. La sección 4 de la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional ha rechazado un recurso de la eléctrica contra una resolución de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que en marzo de 2016 obligó a la eléctrica a devolver 12,3 millones de euros en primas cobradas entre 2009 y 2011 por su única planta termosolar, situada en el municipio de Puertollano (Ciudad Real).

La sentencia rechaza que los «problemas técnicos» de la central «deban ser cofinanciados» por el régimen vigente en aquel periodo de tiempo para incentivar las energías denominadas limpias.

La CNMC reclamó a Iberdrola esa cantidad cobrada de manera indebida, según el organismo de Competencia, en concepto de subvenciones a las energías renovables del periodo 2009-2011 que pagaron los consumidores en su recibo de la luz. La Audiencia Nacional ha avalado la decisión y el caso ha llegado ya hasta el Tribunal Supremo. La sentencia, de abril, ha sido recurrida por Iberdrola en casación y está pendiente de su admisión a trámite en el alto tribunal, según la eléctrica, que ha sido condenada por la Audiencia a abonar las costas.

A lo largo del proceso judicial, Iberdrola defendió que «sólo una pequeña parte del gas empleado» por la planta, «inferior a los límites marcados por la normativa vigente en este periodo, contribuyó a la producción de electricidad«.

Asimismo, la compañía eléctrica intentó demostrar mediante un informe pericial que la utilización de gas «productivo«, el dirigido a crear electricidad, fue «mínimo«. Pero los peritos contratados por Iberdrola «no pudieron aseverar, en los cómputos anuales, a cuánto ascendió ese mínimo, o qué porcentaje supuso en el consumo global del gas productivo«, según viene reflejado en la sentencia.

Los magistrados consideran «evidente» que no todo el gas que ha sido consumido por la planta fue «productivo«, pero comparten el criterio de la CNMC de que «supuso un beneficio para la central«.

La planta termosolar de Puertollano, con 50 megavatios (MW) de potencia, pertenece a Iberdrola (90%) y al Estado (10%) y fue una de las pioneras de este tipo en España y el mundo. La inversión en ella superó los 200 millones de euros. Se puso en marcha en junio de 2009 y la eléctrica decidió hace poco tiempo ponerla en venta.