El euríbor, que sigue siendo el principal indicador para las hipotecas, está en mínimos históricos. Va a cerrar mayo por debajo del 0,5%, un valor casi tres veces por debajo del nivel de hace un año, en concreto se situaba  en el 1,266%. Esta bajada permitirá a las familias hipotecadas, con una hipoteca que ronde los 150.000 euros y con un plazo de amortización de 25 años, obtener un descuento de 52 euros al mes o 624 al año.

 

Como contrapunto a esta buena noticia están las cláusulas suelo que afectan a millones de hipotecados y que impiden bajar de un porcentaje del 3% de media. A ello hay que sumar que el diferencial bancario aplicado no deja de subir.

 
La Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (Adicae) calcula que en España hay alrededor de cuatro millones de personas en cuyas hipotecas está contenida esta cláusula, aunque un informe que el Banco de España presentó ante el Senado en 2010 señalaba que cerca de un tercio de las hipotecas existentes estaban sujetas a cláusulas que limitan las oscilaciones de los tipos de interés. El pasado 20 de marzo, el Tribunal Supremo declaró la nulidad de las cláusulas suelo en los casos en los que se produzca una falta de transparencia, estimando parcialmente un recurso de casación que presentó Ausbanc contra una sentencia que avalaba estas cláusulas.

 

El euríbor tiene aún recorrido y es previsible que continúe la racha bajista Este indicador, que es en realidad el precio al que se prestan dinero los bancos en la zona del euro es, en España,  la principal referencia para el cálculo de préstamos hipotecarios, y suele evolucionar en función de las subidas o bajadas de tipos que aprueba el Banco Central Europeo (BCE).

 

Entre octubre de 2012 y abril de 2013 el euríbor se ha situado por debajo del precio del dinero establecido por el BCE, que hasta la rebaja aplicada el pasado 2 de mayo era del 0,75%. Ese día, en su reunión mensual, el organismo decidió bajar un cuarto de punto los tipos de interés en la zona euro hasta el 0,50%, un mínimo histórico con el que se pretendía estimular la economía y favorecer la concesión de créditos. A partir de entonces, el euríbor ha seguido una suave tendencia descendente desde el 0,510% que marcó el mismo día de la reunión del BCE al 0,474% del pasado viernes. En condiciones normales, el euríbor suele mantener un diferencial con el tipo de interés de la zona euro de entre el 0,3% y el 0,8%, por lo que el euríbor tiene aún recorrido y es previsible que continúe la racha bajista.