El índice de vivienda terminada (nueva y usada) se incrementó en mayo un 3,6% interanual, hasta 1.499 puntos, según refleja la estadística Tinsa IMIE General y Grandes Mercados.  El precio medio de la vivienda en España volvió a registrar un ligero incremento del 0,7% respecto al mes anterior, después de tres meses de estancamiento intermensual. Desde el mínimo registrado en la crisis, en febrero de 2015, el valor medio de la vivienda terminada se ha revalorizado un 14,5% y se mantiene un 34,4% por debajo de los valores máximos de 2007.

 

El subíndice que representa a las islas (Baleares y Canarias) es el que muestra un encarecimiento más notorio respecto a mayo de 2018, un 8,5%. También las capitales y grandes ciudades, con un aumento del 4,8% interanual, registran una tasa de crecimiento superior a la media nacional.  El precio medio en la costa mediterránea era en mayo un 2,9% superior al de mayo de 2018. Tanto las áreas metropolitanas como las localidades más pequeñas de interior (agrupadas en el subíndice ‘Resto de municipios’) se han encarecido por debajo del 2% en los últimos 12 meses, concretamente un 1,8% y un 1,1%, respectivamente.

“Tras un trimestre de estancamiento o incluso ligeros ajustes, en mayo la vivienda vuelve a mostrar cierto incremento de valor”, afirma Rafael Gil, director del Servicio de Estudios de Tinsa. Todas las agrupaciones recogidas en el Índice General experimentaron en mayor o menor medida incrementos en el valor medio de la vivienda terminada respecto al mes anterior, a excepción de las áreas metropolitanas, donde el precio se mantuvo estabilizado.

La recuperación progresiva y en tasas moderadas del mercado residencial eleva hasta el 14,4% el incremento del precio medio de la vivienda terminada en España desde los mínimos de la crisis. La mayor tasa de recuperación corresponde a las capitales y grandes ciudades (+22,9% desde su mínimo), seguidas de cerca por Baleares y Canarias, donde el incremento alcanza el 22%. También la costa mediterránea muestra una revalorización desde mínimos superior a la media española (un 17,9%). En las áreas metropolitanas, la recuperación del valor medio es del 11,3%, más de doble que en el resto de municipios, donde el crecimiento ha sido más modesto: un 5,3% desde mínimos.

La caída general del precio medio de la vivienda terminada desde máximos pre-crisis es del 34,4 %, con cifras muy similares en capitales y grandes ciudades (-34,3%) y resto de municipios (-35,1%). En las áreas metropolitanas y la costa mediterránea, el descenso acumulado desde 2007 está por encima del 40%, concretamente en un 40,5% y un 42,3%, respectivamente. La diferencia respecto a máximos se reduce al 20,1% en Baleares y Canarias.