Llega el momento de las ansiadas vacaciones y para desgracia de casi todos coincide con los precios de los carburantes en récords históricos. Y con un presupuesto cerrado para los merecidos días de asueto, con los tradicionales movimientos con el coche de un lado a otro, ahorrar en el repostaje es vital si no queremos llegar a septiembre con la tarjeta de crédito en la UVI. Por eso nos va a venir muy bien el estudio de precios de gasolina y diésel de más de 10.000 estaciones de servicio realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). Podemos encontrar diferencias de hasta un 8%.
El estudio revela que BonÀrea es la cadena más barata en gasóleo A y gasolina 95, con supermercados y estaciones de servicio en Cataluña y zonas limítrofes de Aragón. Le siguen las cadena de gasolineras automáticas Plenoil, GM Oil (ligada a los cash GM) y Campsa Express, la variante low cost de Campsa. Petroprix iguala a las anteriores, pero solo en diésel. En el otro extremos de la tabla, el de las gasolineras a evitar y para el caso del gasóleo, las más caras son Repsol, BP, Petronor, Petrocat y Valcarce. Sus precios son al menos un 8% más onerosos de media que las más baratas, lo que supone un sobrecoste de hasta 0,18 euros/litro. También Petrocat y Valcarce son las más caras para gasolina 95, con una diferencia que supone hasta 0,20 euros/litro.
Hay dos provincias, Teruel y Lérida, donde más del 40 % de las gasolineras permiten repostar ahorrando al menos 5 céntimos respecto a la media española. También con un porcentaje apreciable de gasolineras baratas, en torno a una de cada cuatro, se encuentran algunas provincias orientales de Andalucía (Córdoba, Almería, Granada y Jaén), mediterráneas (Murcia, Valencia, Tarragona) y del valle del Ebro (Zaragoza, La Rioja y Navarra), así como Cuenca. Por el contrario, en Asturias, Orense, Guipúzcoa y Baleares menos del 10% de las estaciones pueden considerarse baratas.
