Las medidas tomadas por el Gobierno español y el portugués de contener y controlar los precios energéticos están dando resultados y la inflación vuelve a bajar según los datos adelantados del IPC publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE). La inflación anual estimada del IPC en noviembre de 2022 es del 6,8%, lo que supone una bajada de medio punto respecto al dato de octubre. De esta manera seguimos, junto con Francia, ostentando los mejores datos de la Unión Europea.

De confirmarse a mediados de diciembre este avance, el IPC estaría marcando el alza más moderada desde enero, cuando creció un 6,1%. Supondría además el cuarto mes seguido en que los precios recortan su crecimiento en tasa anual y el tercero en que la inflación se sitúa por debajo de la cota del 10%. Desde el 10,8% de julio, el IPC ha ido bajando paulatinamente: en agosto bajó tres décimas, hasta el 10,5%; en septiembre disminuyó 1,6 puntos, hasta el 8,9%, y en octubre se redujó 1,6 puntos, hasta el 7,3%.

Distinto es el caso de la inflación subyacente, aquella de la que se excluyen alimentos frescos y productos energéticos, que se incrementa una décima hasta alcanzar el 6,3%. Por su parte, la inflación intermensual comparada con octubre, se reduce en un 0,1%.

El Instituto Nacional de Estadística asegura que este descenso se debe, sobre todo, a la bajada de los precios de los carburantes y de la electricidad, que experimentan ambos conceptos una bajada mayor que la del 2021. También influye en la moderación de la inflación el hecho de que los precios de vestido y calzado, por la nueva temporada de invierno, han subido menos en noviembre de este año de lo que lo hicieron en el mismo mes de 2021.

Francia con un 6,2%, España con un 6,8% y Luxemburgo con un 6,9% son los países menos inflacionistas de Europa que tiene una media del 11,5% en la zona euro. En las tres repúblicas bálticas (Lituania, Letonia y Estonia) y en Hungría, se supera el 20%.

Con esta subida de la inflación en noviembre ya es posible cifrar en el 8,4&% la revalorización de  las pensiones contributivas así como el Ingreso Mínimo Vital (IMV) en 2023. Por su parte las pensiones no contributivas mantendrán para el próximo ejercicio la subida del 15%  en virtud de una enmienda pactada por el Gobierno con Bildu en el marco de la negociación de los presupuestos.