Pese a que la recuperación del mercado residencial en Zaragoza comenzó a hacerse patente a partir de 2015, algo más tarde que en otras grandes capitales españolas, la ciudad ha registrado en los últimos años una actividad sostenida, con buenos niveles de construcción de obra nueva y también de compraventas. Los precios han ido recuperándose de forma paulatina después de desplomarse hasta un 58% durante la crisis. Pese a ello, el valor medio de la vivienda todavía no alcanza ni la mitad del que registraba en 2007, en algunos emplazamientos.

El desarrollo de proyectos residenciales en Zaragoza se ha concentrado en los últimos años en tres áreas:  Miralbueno, Parque Venecia y la Margen Izquierda, con una oferta principalmente de gama media y media-alta y buenos niveles de ventas. Paralelamente, se han ido desarrollando solares dispersos de pequeño tamaño en el centro consolidado, y en barrios como Romareda-Universidad. Toda esta actividad se ha traducido en que el número de visados de obra nueva se ha incrementado un 60% en el conjunto de la ciudad entre 2015 y 2018.

Los terrenos de Zaragoza Alta Velocidad, en el entorno de la estación del AVE de Delicias, han comenzado su andadura tras años de bloqueo. Con más de 3.000 viviendas previstas, ya se han adjudicado los dos primeros solares. En ese entorno se ubica el que posiblemente sea el proyecto más emblemático de la ciudad en este momento, Torre Zaragoza, en fase de construcción. Se trata de un edificio de 30 plantas, vendido ya en un 80%, donde el precio de las mejores viviendas ha superado los 600.000 euros.

Pero la gran zona de desarrollo pendiente para los próximos años será Arcosur, donde se concentra la principal bolsa de suelo de la capital aragonesa. Este entorno de expansión de la ciudad está enfocado a cubrir la demanda de viviendas de precio más asequible, que, junto con la ampliación de la oferta de alquiler, está entre los retos que afronta el desarrollo urbano de Zaragoza a medio plazo.

Foco logístico estratégico

Otro segmento que está mostrando buenos signos de actividad es el industrial y el logístico. La ubicación de su plataforma logística PlaZa, próxima a la A2 y con una excelente red de transporte y conexión con el aeropuerto, y su dilatada experiencia en la gestión de mercancías la han convertido no sólo en la ubicación más demandada en la actualidad por más del 50% de las empresas españolas, sino que se ha consolidado como el tercer hub de tráfico de mercancías, por detrás de Barajas y El Prat.

PlaZa ha jugado un innegable papel dinamizador del mercado y de renovación de stock, y su próxima ampliación, que requerirá de un presupuesto de 5 millones de euros, la colocará aún más en el punto de mira de los inversores internacionales. Tras las obras, PlaZa ampliará su extensión en 160.000 m2 y junto a los polígonos de Villanueva, Pedrola y Malpica se ha posicionado como un centro logístico de gran atractivo por su ubicación estratégica entre Cataluña, Madrid y País Vasco.

Proyectos industriales y comerciales

En el ámbito industrial, el desarrollo más significativo parte de Corporación Alimentaria Guissona (bonÁrea Corporación), que está ejecutando las obras de su nuevo centro fabril y distribuidor de 170 hectáreas en el municipio de Épila, a 46 km de Zaragoza capital. Este proyecto, para el que está prevista una inversión de 400 millones de euros, permitirá a la agrupación empresarial bonÁrea centralizar su expansión hacia el norte, centro y levante. Según las previsiones iniciales, la urbanización del terreno se realizaría entre 2021 y 2026.

Por último, en el terreno comercial, el complejo ‘Torre Village’, del que ya se ha ejecutado el 75% de su construcción, concentrará el epicentro de las compras en el norte de España. Promovido por Iberebro en los terrenos de la antigua fábrica de colchones Pikolín en la carretera de Logroño, el proyecto cuenta con un presupuesto de 100 M€, tiene capacidad de 65.000 m2 y está situado a solo 10 minutos en coche del aeropuerto y del centro de la ciudad. ‘Torre Village’ fue paralizado en los tribunales, pero el proyecto se ha desbloqueado con la llegada de la nueva Corporación municipal tras las elecciones locales y autonómicas de este año. La previsión es que pueda abrir sus puertas en la primavera de 2020.