Ha sido sin lugar a dudas, la mejor noticia de la semana para los hipotecados españoles y un gran éxito para la asociación de consumidores Adicae. El pasado viernes 23 de noviembre, la sección 28 de la Audiencia Provincial de Madrid confirmaba la nulidad de las cláusulas suelo al considerarlas abusivas y condenaba a todos los bancos a devolver las cantidades indebidamente cobradas por este concepto desde la firma de la hipoteca, más los intereses y las costas.

Era Adicae, la asociación de consumidores, la que había llevado esta causa, la mayor acción judicial interpuesta contra la banca en España, en nombre de 9.000 representados y en contra de 40 entidades bancarias, que tenían o habían tenido estas cláusulas suelo en sus contratos hipotecarios.

Las suelo fueron habituales en una gran parte de los contratos hipotecarios desde el año 2005 hasta el 2016, en que fueron siendo retiradas de manera gradual. Con este artificio, los bancos impedían que los clientes se beneficiaran de las bajadas del euríbor, teniendo que soportar diferenciales de más de tres puntos y unas cuotas hipotecarias que poco tenían que ver con lo que hubieran tenido que pagar, de no haber incurrido la banca en esta nuevo abuso. Ahora tendrán que devolverlo todo junto.

La sentencia, dictada el pasado 12 de noviembre en segunda instancia, después de que el Juzgado de lo Mercantil nº 11 de Madrid fallara en el mismo sentido  en abril de 2016, supone un nuevo correctivo a todo el sector bancario español representado por esas 40 entidades condenadas. Y si la credibilidad, por ya perdida no les preocupa, otra cosa son los 7.700 millones de euros que les va a suponer el fallo judicial.  Y hay que tener en cuenta que el sector tan sólo había provisionado 3.000, con lo que esos casi 5.000  millones suplementarios van a suponer un nuevo quebranto.

La sentencia, también muestra la manifiesta culpabilidad de la banca en el atasco judicial que supuso la decisión impulsada por el Partido Popular de llevar esta causa a los juzgados, donde la banca ya ha perdido casi el 98% de los casos resueltos. En estos juzgados especializados se han recibido ya más de 305.000 demandas y tan sólo se han resuelto poco más de 7.000. Resulta vergonzoso que la banca recurra por sistema todas las sentencias. Y pudiera ser que también recurriera esta última en casación ante la Sala Primera del Tribunal Supremo.  Aunque en pura lógica se debiera obligar al sector financiero a que realizara las devoluciones de lo cobrado de más a los usuarios, más los intereses, sin más dilación.

Al aplicar la retroactividad, la Audiencia de Madrid considera la nueva jurisprudencia emanada desde el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) e incrementa de forma considerable la deuda de las entidades bancarias. También es importante la condena en costas, ya que ahora la banca tendrá que sopesar si le interesa continuar litigando en los tribunales, a sabiendas que va a tener que pagarlo todo y que cuanto más lo demore mayor será la suma final.

Y si esta decisión de la Audiencia Provincial de Madrid era la palada de cal de la semana, ha sido el PSOE quien ha puesto la de arena. Y lo hace con la nueva Ley de Créditos Hipotecarios en la que mantiene la disposición transitoria primera, que implica la retroactividad de la cláusula de vencimiento anticipado. Las reuniones comenzaron el pasado día 27 y terminarán en la última sesión del Congreso antes de las vacaciones de Navidad, el próximo 17 de diciembre.

La  cláusula de vencimiento anticipado aparece en todos los contratos hipotecarios y permite a los bancos finalizar el contrato hipotecario de manera unilateral  por el impago de una sola cuota, sin importar los años ni la cantidad que se lleven pagando. A partir de ese momento podrá exigir el pago total de lo adeudado, llegando al desahucio si éste no se produce.

EL PSOE quiere aumentar hasta las doce cuotas impagadas lo necesario para llegar a la suspensión del contrato, lo que parece más lógico que la situación actual y que en los futuros contratos hipotecarios pactados entre banco y cliente se pueda poner esta cláusula. Lo que no es lógico y si una gran ayuda para los bancos  que huele en demasía, es que por sorpresa impone que sea una medida retroactiva y que se aplique a todos los contratos hipotecarios ya existentes. Es decir, que se sustituya una cláusula abusiva, que debiera ser eliminada del contrato por el banco, por otra, lo que no tiene nada que ver con la jurisprudencia del TJUE.

Con esta medida se espera que todos los desahucios que estaban paralizados sean activados por la banca y se produzca un tsunami de lanzamientos el próximo año. Está claro que el PSOE ha tomado el relevo del PP –siempre lo han hecho- para defender a la banca en este nuevo turno que tiene de Gobierno de España. Y de esta manera intenta salvarle de un grueso problema del que no sabía como salir, con la amenaza del TJUE que ya está presente en el caso. Está claro que han pedido ayuda al PSOE y éste se ha puesto las rodilleras.

Y es que la situación está muy difícil para la banca que, a día de hoy, cuenta con una cláusula abusiva y por lo tanto nula para ejecutar el contrato hipotecario, lo que implica que cualquier juez le conceda el derecho a reclamar las cuotas vencidas y no pagadas, pero no a ejecutar el contrato y exigir el monto total de la deuda, con el consiguiente desahucio.  Su única posible salida es la que han diseñado entre PP, Ciudadanos y PSOE, que para esto de ayudar a sus amigos banqueros siempre se han puesto de acuerdo.

Pero a pesar de la estrategia desarrollada con los partidos de derechas, la situación continúa sin estar clara. Y hay dos puntos importantes que deben estar poniendo los pelos de punta a los banqueros:

  • ¿Qué pasa con los ya desahuciados por una cláusula que es nula?…pueden ser más de 500.000 en estos largos y duros años de crisis.
  • Y por otro lado, aunque se aplique esta retroactividad, tiene toda la pinta de que terminará como cuestión prejudicial en el TJUE. ¿Por qué?

Porque la Directiva 93/13 es contundente al respecto y su interpretación no da lugar a dudas, a pesar del PSOE y del Supremo.  El Derecho de un Estado miembro no puede restringir la facultad de apreciación de  un juez nacional cuando constata el carácter abusivo de una cláusula en un contrato hipotecario celebrado entre un particular y un profesional. Y a este juez no se le puede impedir que deje sin aplicación la mencionada cláusula, como intenta el partido socialista con la medida, si aprecia su abusividad. Es decir, que la anule y la elimine del contrato. No hay posibilidad, por lo tanto, de que el juez fije intereses de demora, ni nuevas condiciones para el vencimiento anticipado, ya que debe ceñirse a la legislación comunitaria muy clara al respecto: “Cláusula abusiva, cláusula nula sin sustitución».

Las leyes nacionales no pueden afectar al cumplimiento de la Directiva. Ni una cuota, ni tres como quería De Guindos, ni doce como nos quiere vender el PSOE como exhibición pública de su bonhomía. Para los contratos ya firmados la cláusula debe eliminarse. La retroactividad que se quiere aplicar es en este caso contraria a la legislación comunitaria y su defensa nos llevará a un nuevo ridículo en el TJUE.

Y por otro lado es preciso considerar la situación caótica en la justicia, con un Supremo devaluado y unos jueces  de juzgados y audiencias enfrentados a las decisiones de sus órganos superiores.

El nuevo fallo contra la banca llega en un momento crítico para el sector, que en las últimas semanas ha perdido cientos de millones de euros en Bolsa después de que el Tribunal Supremo cambiara su criterio y decretara que son las entidades quienes deben pagar el impuesto de actos jurídicos documentados de las hipotecas. Una doctrina que fue revisada días después, con un vergonzante nuevo dictamen a favor de la banca, pero que llevó al Gobierno a cambiar la ley para que sea la banca quien pague el impuesto, pago del que ya se han resarcido subiendo las hipotecas.

La situación económica, a pesar de esa falsa recuperación que se nos ha querido vender, continúa siendo delicada para millones de españoles y dar facilidades a los bancos tan sólo va a traer decenas de miles de lanzamientos de nuevo, con el sufrimiento y desesperación que los desahucios causan en las personas. El último caso es demasiado reciente. El PSOE tiene que recapacitar y entender que para defender a la banca ya están PP y Ciudadanos, y que si es un partido progresista y de izquierdas se debe al pueblo. Y las elecciones pueden estar demasiado cerca para no tenerlo presente. Que se guarde la pala y deje la arena para los otros.

Eduardo Lizarraga

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