En pocas palabras un secreto a voces. El Black Friday engaña con los descuentos, genera residuos y contaminación en beneficio sólo de las grandes empresas; y es un desastre para el pequeño comercio. Diputados de ¡En Marcha!, el partido del presidente de la República, Emmanuel Macron, con el apoyo de otras fuerzas políticas han aprobado una enmienda contra los falsos descuentos que consideran que ocurren este día. Se enmarca dentro del borrador del proyecto de ley anti residuos que el Parlamento de Francia debatirá el próximo 9 de diciembre.

En el texto aprobado se establece que «además de su desastroso historial medioambiental, Black Friday se basa en comunicaciones engañosas a los consumidores en las que les hacen creer que se están beneficiando de reducciones de precios considerables«, cuenta Cinco Días.

Diputados del partido de Macron ya se han manifestado a través de su cuenta de twitter. Es el caso de Matthieu Orphelin que se mostró satisfecho en su publicación «Aprobamos una enmienda para que se detenga la práctica abusiva del Black Friday. Stop al consumo excesivo y a las comunicaciones que inducen a error a los consumidores» haciendo referencia a la publicidad engañosa. Acto seguido, felicitó a la propulsora de la medida, Delphine Batho, exministra de Medio Ambiente y diputada del partido Generación Ecológica.

La ministra de Transición Ecológica del país galo también se ha mostrado en contra de la celebración de este día. Elisabeth Borne ha criticado los atascos que se producen y la contaminación y emisiones de gases que esto provoca. Además, la ministra cree que esta fecha no beneficia a los pequeños comercios franceses sino únicamente a las grandes empresas.

Cinco Días también señala un estudio de 2016 realizado por la asociación de consumidores UFC-Que Choisir en el que se apuntaba que la reducción promedio de los precios del Black Friday fue inferior al 2%.