Los manejos de Iberdrola para situar sus beneficios a la cabeza de los del sector van quedando al descubierto. Y sus beneficios proceden de nuestros bolsillos y de su capacidad para saquearlos. Van a procesar a cuatro de sus directivos por inflar artificialmente el precio de la luz en 2013, pero no nos hagamos ilusiones de que les condenen, hordas de abogados ya están preparándose para el juicio. En este país solo se condena a los pobres y a los tontos. Y además, aunque al final les pongan una multa, ¿alguien piensa que le devolverán algo de lo robado?… pues eso.

Es la Audiencia Nacional (AN) ha procesado a Iberdrola Generación y a cuatro directivos de la compañía por haber inflado artificialmente el precio de la luz a finales de 2013 paralizando varias centrales hidráulicas.

El magistrado Ismael Moreno, en un auto fechado el pasado 26 de mayo, ha acordado continuar los trámites de procesamiento de una causa que arrancó en 2017 tras una denuncia de la Fiscalía Anticorrupción. Según explica el juez, las investigaciones y diligencias practicadas durante estos cinco años han acreditado «el artificial incremento del precio de la energía eléctrica que vendía Iberdrola», lo que resulta suficiente para procesar a la eléctrica por delitos contra el mercado y los consumidores.

FACUA-Consumidores en Acción, que ejerce la acusación particular en el caso, ya había solicitado al juez Moreno en 2020 que pidiese a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) que calculase cuál habría sido el precio de la electricidad si Iberdrola no hubiera provocado su subida mediante la paralización de las centrales.

Competencia estimó que Iberdrola había provocado un aumento del precio del mercado diario de unos 7 euros por megavatio hora, con lo cual habría obtenido unos beneficios estimados de 21,5 millones de euros y provocado un perjuicio de 105 millones en el periodo comprendido entre el 30 de noviembre y el 23 diciembre de 2013.

Multa de 25 millones

En 2015, dos años después de las irregularidades, la CNMC multó a Iberdrola con 25 millones de euros por haber inflado fraudulentamente el precio de la electricidad. En 2017, la Fiscalía Anticorrupción presentó la denuncia contra la empresa al considerar que incurrió en un «delito contra el mercado y los consumidores» que le permitió obtener un «lucro ilícito» de 20 millones de euros. FACUA ya se había dirigido en 2015 a la Fiscalía General del Estado, que le dio traslado a la Fiscalía de Vizcaya, la cual decidió archivarla.

En su resolución, de noviembre de 2015, la CNMC dictaminó que la empresa había alterado fraudulentamente el mercado incrementando el precio de la oferta de sus centrales hidráulicas de los ríos Duero, Sil y Tajo. Al recortar intencionadamente la producción de energía hidráulica, la más barata, para que entrara en el mercado mayorista de la electricidad -denominado pool– la procedente de los ciclos combinados, que son mucho más caros y acaban marcando un precio final más alto.

Ahora, el magistrado ha explicado en su auto que los hechos por los que pretende juzgar a Iberdrola se aprecian en su oferta de energía. Así, se remite a los datos aportados por la CNMC: el aumento del precio en unos 7 euros y el perjuicio a la demanda de 105 millones durante las semanas de 2013 que han sido investigadas.

El auto también recoge el proceso de investigación abierto en 2017, así como buena parte del expediente sancionador que le incoó Competencia. La Audiencia Nacional ordenó el registro de las sedes de Iberdrola en Madrid y Bilbao para obtener información acerca de cómo y quién había tomado la decisión de paralizar los embalses.

La investigación concluyó el pasado mes de marzo, y se dirigió a la Fiscalía Anticorrupción para que informase sobre el procedimiento a seguir. En su informe, éste pidió continuar con los trámites de procedimiento abreviado contra cuatro directivos e Iberdrola Generación como persona jurídica.

Cuatro directivos procesados

Fue la actuación de la Policía Judicial la que permitió obtener suficiente información y tomar declaración de testigos que aportaron datos clave sobre la manipulación de precios y los responsables, lo que acabó con la imputación de estos cuatro de sus entonces directivos: el director de Gestión de Energía, A.C., el exresponsable de Optimización, Gestión de Recursos y Trading, G.R., el jefe de Gestión de Activos, J.L.R.J., y el jefe de Gestión de Mercados a Corto Plazo y Generación Global, J.P.

La versión de Iberdrola es que el precio del mercado subió a finales de 2013 por circunstancias ajenas, que en ese periodo hubo escasez de agua y llegó a los embalses un 25% de lo normal y que no obtuvo ningún beneficio por la paralización de sus centrales hidráulicas.

Por lógica la pregunta que nos hacemos todos es ¿de quién es la mano que mece la cuna? es decir, quién ordenó a estos directivos que actuaran de este forma. Seguro que ni el mismo Iker Jiménez tiene la respuesta.