La constante subida del euríbor está volviendo a dejar de manifiesto la torticera forma de actuar de los bancos y su afán desmedido para aprovecharse de la situación y vaciar un poco más los bolsillos de los hipotecados. Primero fue con la avalancha de usuarios que cambiaron sus hipotecas de variables a fijas. Ahora de los que fijan un acuerdo para la hipoteca a unas condiciones y estas cambian -a peor- cuando van a firmar el contrato hipotecario.
Para ambos casos la Asociación de Usuarios Financieros (Asufin ) asegura que está observando malas prácticas, como que las entidades no están respetando las FEIN vinculantes, con subidas de precio en las ofertas finales a los clientes, o subrogaciones encubiertas para sortear la Ley de subrogación hipotecaria
Asufin denuncia que en muchos de los cambios a hipotecas fijas se están realizando prácticas de dudosa legalidad y generando una situación de indefensión e inseguridad entre los hipotecados, en estos momentos de inquietud por la acusada subida del Euribor. En concreto, están observando que no se están respetando los tiempos fijados por las ofertas vinculantes y cuando el cliente procede a formalizar el cambio, la entidad le notifica una subida del tipo de interés.
De forma diaria se incrementa el número de quejas de personas que tienen una oferta de la entidad con validez de 30-60 días, o incluso entrega la FEIN (Ficha Europea de Información Normalizada) pero sorpresivamente se retira la oferta antes de finalizar el plazo. Esta situación se da porque algunas entidades están haciendo ofertas a más clientes de los que pueden asumir en esas condiciones concretas, una vez que se acaba el cupo, modifican la oferta a peor para el siguiente grupo de clientes.
Así, muchos clientes se han encontrado con que tenían hasta fin de mes para pensarse una oferta a tipo fijo del 1,95%, por ejemplo, y que le cambian al 2,55% antes de que acabe el plazo. Se trata de una situación sumamente irregular pues las ofertas vinculantes tienen un plazo mínimo para que el cliente tome la decisión y la entidad debe mantenerla durante ese tiempo. Una situación que también denuncian algunos sindicatos pues a los empleados de banca tampoco les están respetando las condiciones ofertadas, empeorándoles la situación sorpresivamente.