Si alguien pensó que las entidades financieras iban a actuar con ética en la situación actual, se volvió a equivocar. Habrá que obligarles. Así, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha comenzado a investigar las primeras 50 denuncias recibidas en su nuevo buzón de consulta sobre conductas anticompetitivas relacionadas con el coronavirus, entre las que se incluye la exigencia por parte de algunas entidades financieras de suscribir un seguro de vida para la concesión de los préstamos ICO que cuentan con el aval del Estado.

La CNMC está investigando si esta exigencia de garantías adicionales constituye una conducta desleal que, por falsear la libre competencia, afecta al interés público en un contexto de crisis derivada de la pandemia de Covid-19, según explica en un comunicado.

La línea de avales de hasta 100.000 millones de euros aprobada por el Gobierno para garantizar la liquidez de las empresas afectadas por la crisis desatada por el coronavirus está operativa desde este lunes 6 de abril, una vez que el Instituto de Crédito Oficial (ICO) y las entidades financieras han suscrito los correspondientes convenios de colaboración. Lo que es una práctica contra el país y los afectados es que determinados bancos se proveches de la situación para vender sus productos.

A raíz de las consultas recibidas en este buzón, el supervisor también está investigando los «sustanciales» incrementos del precio de determinados productos de protección de la salud, como los geles hidroalcohólicos, así como las materias primas necesarias para su producción, como consecuencia del aumento de la demanda global y el actual desabastecimiento en el mercado.

Por ello,  están analizando de manera pormenorizada la evolución de estos mercados en España para identificar y, en su caso, sancionar la existencia de conductas anticompetitivas derivadas de tales incrementos de precio.