Durante el mes de febrero, el precio diario de la electricidad en el mercado mayorista ha sido de 40 euros/MWh. Este hecho provoca que la reducción del IVA al 10% quede anulada en todas las facturas emitidas que incluyan la facturación de un solo día de marzo, con lo que la subida real del precio de la luz que paga el consumidor ya es un hecho.

Las asociaciones de consumidores piden consolidar el IVA reducido

Pero las asociaciones de consumidores no están de acuerdo y piden que, al igual que en otros países europeos, el impuesto que grava el precio de la luz se mantenga en el 1o%. FACUA-Consumidores en Acción insta al Gobierno a consolidar la bajada del IVA en la electricidad de forma permanente, en lugar de la apuesta actual por una reducción temporal y supeditada al precio del megawatio hora. También la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) advierte que la electricidad es un servicio básico, de primera necesidad y así debería tratarse a nivel fiscal, por lo que reitera su petición de que este servicio básico tenga un IVA reducido permanente del 10%. 

Otros países de la Unión Europea, como Bélgica y Portugal han aprobado cambios fiscales que contemplan un IVA superreducido del 6% para la electricidad, apunta OCU. Al menos, para consumos básicos.

El IVA de la luz subirá este martes de nuevo al 21% en virtud del mecanismo diseñado por el propio Real Decreto-ley 8/2023, que contemplaba un impuesto del 10% siempre y cuando los precios del mercado mayorista estuviera por encima de los 45 euros el megawatio hora. Al no haberse superado ese precio durante el mes de febrero, marzo no contará con dicha reducción, y habrá que esperar a conocer el precio de la electricidad durante este mes para averiguar qué ocurrirá con abril. Desde junio de 2022 y hasta enero de este año, el IVA aplicado había sido del 5%.

Mantener el precio de la luz controlado es fundamental para controlar la inflación

En este sentido, aunque FACUA ha valorado de forma positiva la reducción del IVA de la electricidad, que ha logrado contener los precios y evitar que se disparen aún más, señala que la medida no puede tener carácter coyuntural y debe desligarse de los vaivenes del mercado.

De esta manera, la asociación insiste en que considera fundamental que se consolide un impuesto reducido, y que la bajada de recaudación para las arcas del Estado que se derive de esta disminución del IVA puede ser perfectamente compensada con un aumento en los impuestos directos que afecte a quienes más ganan -grandes empresas-, de manera que se sigan garantizando cuestiones esenciales como la sanidad y la educación públicas.

La factura de un hogar medio con la tarifa PVPC de febrero se sitúa en 51,64 euros.Una rebaja del 18% respecto al pasado mes de enero (63,1 euros). Sin embargo, muchos hogares no podrán apreciar esta rebaja ya que si la factura incluye los consumos de algún día del mes de marzo, el IVA aplicado al conjunto de la factura será del 21%. Si aplicamos este tipo impositivo a la factura de febrero se elevaría a 56,81 euros. OCU estima que de mantenerse el IVA del 21% durante todo un año, el incremento de la factura por este tipo impositivo será de 62 euros.

Un problema añadido para los hogares con PVPC, es que la nueva metodología de cálculo estrenada el pasado mes de enero, ha provocado que la fuerte reducción de precios en el mercado mayorista, (que ha motivado la subida del IVA) no se va a trasladar totalmente al consumidor ya que se ha introducido un ajuste que incorpora los mercados de futuros. El resultado de ese ajuste es que el precio del nuevo PVPC es durante el mes de febrero es un 14% más caro que el que hubiera resultado con la antigua metodología. Aplicado a la factura de un hogar medio: durante el mes de febrero los hogares con PVPC van a pagar 5 euros más por este motivo.

Debe avanzarse en la creación de una empresa pública de energía

FACUA también recuerda que lleva años pidiendo al Gobierno que inste a la Unión Europea a acometer una profunda reforma del mercado eléctrico, que debe pasar por la salida de la producción hidráulica y nuclear de la subasta marginalista, ya que ambas provocan incrementos injustificados en los precios.

De igual forma, también resulta necesario avanzar en la creación de una empresa pública de energía y la recuperación para el Estado de las concesiones de centrales hidroeléctricas que caduquen para integrarlas en una empresa pública generadora de energía, de manera que con ella puedan fijarse precios justos que contribuyan a reducir la factura de la luz.

Junto a estas medidas, la asociación también incide en que debe realizarse un mayor control del fraude que se comete en el sector eléctrico -ofertas engañosas, incumplimientos de periodos de contratación…- y reformar el sistema de concesión del bono social para que pueda llegar a muchas más familias que lo necesitan.