El presidente de la Federación Nacional de Asociaciones Inmobiliarias (FAI), José María Alfaro, ha expresado su preocupación por la falta de efectividad de las medidas adoptadas por las administraciones para abordar la crisis habitacional más grave en España en los últimos 50 años. Según Alfaro, estas políticas no están resolviendo el problema, mientras que la oferta de viviendas de alquiler sigue disminuyendo drásticamente.
Sube la demanda y cae la oferta de viviendas en alquiler
Alfaro destaca un desequilibrio alarmante en el mercado:
- Incremento de la demanda: La necesidad de alquileres ha crecido un 26,28% anual, según los datos recopilados por FAI.
- Descenso de la oferta: El inventario de viviendas para alquiler de larga estancia ha caído un 36,3%.
Esta situación está provocando un aumento continuo de los precios, con un impacto significativo en el acceso a la vivienda, especialmente en las zonas más tensionadas.
Mayor seguridad jurídica: una solución para recuperar la confianza
El presidente de FAI aboga por medidas que generen confianza entre los propietarios:
- Políticas incentivadoras: Alfaro critica las iniciativas restrictivas, ya que generan miedo y desconfianza en el sector.
- Seguridad económica y legal: La implementación de avales públicos exprés o seguros de alquiler podría ser clave para incentivar a los pequeños propietarios, responsables del 95% de la oferta de viviendas en alquiler.
FAI propone trabajar en conjunto con las administraciones para diseñar medidas complementarias que protejan tanto a los inquilinos como a los propietarios.
El atasco judicial retrasa los desahucios por impago de alquiler
Otro de los problemas críticos señalados es el retraso en los procesos judiciales de desahucio por impago:
- Tiempos excesivos: Los desahucios pueden tardar más de un año en resolverse, lo que desincentiva a los propietarios a mantener sus inmuebles en el mercado de alquiler.
- Impacto en la oferta: Este problema estructural agrava la escasez de viviendas disponibles.
FAI ve con buenos ojos el anuncio de seguros públicos para alquiler, pero exige mayor concreción en su implementación.
Hacen falta medidas rápidas porque no se puede esperar a construir centenares de miles de viviendas
Alfaro insiste en que esperar a la construcción de nuevas viviendas no es una solución viable a corto plazo. Los niveles de obra nueva no son suficientes para cubrir la demanda creciente, lo que incrementa el déficit de viviendas año tras año.
Por ello, propone:
- Acciones inmediatas que fomenten la puesta en el mercado de viviendas ya existentes.
- Colaboración entre los tres niveles de la administración (nacional, autonómico y local) para abordar un problema complejo y multifacético.
El déficit de viviendas nuevas se incrementa cada año
El ritmo de construcción de vivienda pública y privada está muy por debajo de las necesidades actuales. Esto no solo dificulta el acceso a la vivienda, sino que también afecta la estabilidad del mercado inmobiliario en su conjunto.
El camino de los seguros de alquiler puede ser un acierto
Los seguros de alquiler representan una alternativa prometedora para aumentar la oferta de viviendas:
- Protección para los propietarios: Garantizan el cobro de rentas, reduciendo el riesgo asociado al alquiler.
- Mayor confianza en el mercado: Facilitan la reincorporación de viviendas al inventario disponible.
FAI insta a las administraciones a acelerar la implementación de estos seguros y a acompañarlos de incentivos adicionales para los propietarios.
La crisis habitacional no puede esperar a contruir las viviendas necesarias
La crisis del alquiler en España requiere medidas inmediatas y efectivas que equilibren la balanza entre oferta y demanda. José María Alfaro, como representante de FAI, subraya la necesidad de garantizar mayor seguridad jurídica y económica para propietarios e inquilinos, así como de implementar políticas que incentiven, en lugar de restringir, el mercado del alquiler.
La solución pasa por actuar con rapidez, colaboración y creatividad, para que el acceso a la vivienda deje de ser un privilegio y se convierta en un derecho real para todos los ciudadanos.
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