Según los últimos informes de Eurostat, la actividad de la construcción en la zona euro ha mostrado signos de recuperación en algunos países, mientras que en otros ha continuado enfrentando desafíos mostrando un panorama muy diverso.

La actividad del sector de la construcción se incrementa un 1,7% en junio

En el mes de junio, de acuerdo a los datos estadísticos europeos, la zona euro registró un crecimiento anual del 1% en la actividad de la construcción, lo que es un dato muy positivo ya que rompe cinco meses de caídas pero con altibajos. En comparación intermensual, la actividad de la construcción en la zona del euro se incrementó un 1,7% en junio, el primer repunte después de tres retrocesos consecutivos, tras bajar un 0,9% en mayo. En la UE, el dato avanzó un 1,4%, frente a la caída del 1,1% en mayo.

En junio, los mayores aumentos anuales de la producción en el sector de la construcción se registraron en España (4,8%), Bulgaria (2,9%) y Portugal (2,7%), mientras los mayores retrocesos se dieron en Eslovenia (-19%), la República Checa (-10,2%) y Suecia (-9%).

Este crecimiento se produce después de una disminución del 2,1% en mayo, lo que sugiere que el sector comienza a encontrar un camino hacia la estabilización. Pero los datos optimistas no son uniformes ya que en el conjunto de la Unión Europea, la actividad retrocedió un 0,1% en términos anuales, la quinta bajada consecutiva en el bloque comunitario.

A pesar de los malos datos España se coloca en cabeza de la construcción

Uno de los aspectos a destacar del informe de Eurostat es el papel que está jugando España en el panorama europeo. Según los datos publicados, España se sitúa a la cabeza del crecimiento del sector de la construcción, con un 4,8% de aumento interanual. Este crecimiento contrasta con la situación de otros países, como Eslovenia, Chequia y Suecia, que se colocan a la cola de los datos del sector construcción.

El liderazgo del sector constructivo español se está viendo impulsado por la constante entrada de capitales en el mercado español, la reactivación de la demanda nacional y la puesta en marcha de diversos proyectos de infraestructuras.   Además, las medidas de apoyo a la construcción impulsadas desde el Gobierno y las necesarias inversiones para el desarrollo de la vivienda están impulsando la actividad constructora de promotores públicos y privados.

No es únicamente España la que está impulsando su sector de la construcción, que tiene unos interesantes resultados en el mercado laboral y la economía inducida, sino que otros países como Portugal (3,2%), Rumanía (2,6%) y Francia (1,7%), afectados por la crisis de la vivienda, están dando un empuje muy visible a sus respectivos sectores.