El mercado inmobiliario ha comenzado a seguir la senda prevista y se está abaratando. Así lo indican los datos publicados por el Centro de Información Estadística del Notariado, asegurando que en el sexto mes del año el precio medio de la vivienda en España retrocedió un 3,9% con respecto al mismo periodo de 2019. Esa bajada interanual supone una ruptura absoluta con la tendencia que arrastraba el sector , con 45 meses de subidas ininterrumpidas, teniendo que retroceder más de cinco años, hasta marzo de 2015, para encontrar una mayor caída

De acuerdo con la información facilitada por el Consejo General del Notariado, el importe medio de una vivienda se situó en junio en 1.393 euros por metro cuadrado. Como principal causa de esa caída de precios aparecen las viviendas unifamiliares, que con una media de 1.016 euros por metro cuadrado se abarataron interanualmente un 9,6%. Los pisos en bloques de vivienda apenas se movieron, bajando un 0,1% (1.625 euros) en su conjunto. Los pisos libres de segunda mano registraron menores precios que un año atrás (1.554 euros, -3,3%) y hay que resaltar que los de obra nueva se encarecieron considerablemente (2.164 euros, un 5% más).

Las variaciones de precios habidas hasta marzo se dieron en un contexto general de recuperación del mercado. Pero tras la declaración del estado de alarma el 14 de marzo comenzó la bajada, abril fue el mes de máximo confinamiento y las medidas de desescalada que se iniciaron en mayo no se generalizaron en todo el territorio prácticamente hasta junio, mes en que además decayó el estado de alarma el día 21. Así, buena parte de las trabas para llevar a cabo operaciones de compraventa de vivienda desaparecieron en el sexto mes del año, y la actividad rebotó en consecuencia.

Según los datos notariales, en junio se firmaron 36.319 ventas de vivienda en las notarías de toda España. La cifra supone perder una de cada cinco operaciones respecto a junio de 2019 (un 20,9% exactamente), pero mejora con mucho los registros de mayo (25.667 operaciones) y sobre todo de abril. En el cuarto mes solo se firmaron en España 14.934 ventas, un 70% menos que en el año anterior. La situación tiene trazas de no comenzar a mejorar hasta bien entrado el 2021.

El confinamiento ha influido en las apetencias de vivienda de los compradores.  Los segmentos que mejor evolución presentaron fueron precisamente  donde más subieron y bajaron los precios: los pisos libres a estrenar y las viviendas unifamiliares, respectivamente. En estas últimas, el número de operaciones se contrajo un 13,9% con respecto a junio de 2019, mientras que en el caso de los pisos de obra nueva incluso se mejoraron las cifras de doce meses antes al firmarse 3.878 operaciones, un 9,7% más. La vivienda de segunda mano deberá ajustar su precio si quiere tener mercado ya que se colocaron un 28,5% por debajo de los niveles del año anterior.