Porque no salgan publicados en los grandes medios de comunicación no quiere decir que ya no se produzca. Al igual que los desahucios siguen, también continúan produciéndose suicidios por desahucio, como éste que se produjo en la noche de Navidad y que no ha tenido apenas repercusión. Lo denuncia el Sindicat de Llogaters de Barcelona.

La noche de Navidad una vecina de Barcelona se suicida antes de su desahucio

Terminamos el año con la peor de las noticias. La noche de Navidad, una vecina de Barcelona se suicidó ante la inminencia de su desahucio.

La voluntad de la inmobiliaria y la propiedad de obtener más dinero de ese alquiler hicieron que activaran el proceso para desahuciarla, sin miramientos y a la primera de cambio, ante un primer retraso en el pago del alquiler. Los servicios municipales intervinieron y lograron aplazar un mes el desahucio, mientras le buscaban un realojo que no llegaba.

Finalmente, viendo que se acercaba la nueva fecha de desahucio, con todas sus pertenencias ya en cajas, decidió quitarse la vida. Queremos respetar el anonimato de esta compañera y la intimidad de su familia. Enviamos un fuerte abrazo a todas las personas que la conocían y la querían.

El sistema continúa sin garantizar una vivienda para todos los ciudadanos

Pero no podemos quedarnos en silencio ante un ejemplo más de un sistema injusto, absurdo y enfermo. Cuando se llega a este extremo, todo ha fallado. Pero lo primero que falla es un sistema en el que la población no tiene garantizado un hogar digno, estable y seguro, un sistema que permite e incentiva el rendimiento y la especulación con un derecho básico, que rentabiliza incluso la desesperación y el sufrimiento. También ha fallado un enfoque público que solo ofrece prórrogas y moratorias cuando llega el momento del desahucio, pero que no resuelve el problema.

La amenaza de perder la vivienda, de no poder pagarla, de ser expulsado de casa, es motivo de angustia insoportable para cada vez más personas. Ella estuvo luchando, pero no pudo más. Por ella y por tantas personas más, nos organizamos y luchamos por el derecho a la vivienda y por una vida digna.

Las cifras ocultas de los suicidios por deshucio